
Sembrando el futuro del Turismo Deportivo en Juan de Acosta, Colombia
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La visión de Alex de Suelta la Barra
¡Qué onda, familia de SUELTALABARRA! Soy Alex, y hoy quiero llevaros conmigo a un viaje que me llena de energía y esperanza: el que me conectó con un proyecto increíble en Juan de Acosta, Colombia. Si me seguís por aquí, ya sabéis que vivo y respiro deporte, en especial el kitesurf y que mi misión es contagiar esa pasión y mostrar cómo el deporte puede ser un verdadero motor de cambio.
Hace poco, tuve el privilegio de participar en una charla que me dejó el corazón contento, con gente con una visión increíble: Andrés Sarmiento, gerente ejecutivo de la Red Latinoamericana de Turismo Deportivo, Farid Martínez, profesor de turismo y emprendimiento y coordinador local del semillero, Melissa Arteta, secretaria ejecutiva de la red, y un grupo de estudiantes brillantes de la institución en Juan de Acosta, Colombia. La reunión se centró en el desarrollo del turismo deportivo en Juan de Acosta, la importancia de la comunidad en la organización de eventos y las oportunidades de negocio que surgen de la economía circular y la colaboración local.
La chispa en Juan de Acosta: Más allá del Kitesurf y las problemáticas
Andrés me explicó la realidad de Juan de Acosta, un municipio con recursos económicos limitados y una fuerte dependencia del turismo externo. Me impactó saber que la náutica no pertenece a la administración municipal ni gubernamental, sino a un ente privado. Esto significa que los eventos deportivos que se realizan suelen venir de fuera, de ciudades como Barranquilla, sin dejar ingresos significativos en la comunidad local. Me recordaron lo que Melissa y yo ya habíamos hablado sobre el mundial de kitesurfing, donde incluso el patio de comidas y los emprendedores eran de fuera de Juan de Acosta.
Ante esta situación, la Red Latinoamericana de Turismo Deportivo ha estado fortaleciendo el tejido comunitario en torno al turismo deportivo, creando la mesa de turismo deportivo y ahora este semillero. El semillero tiene una particularidad: cuenta con alianzas privadas y públicas. Como red, enseñan la metodología, forman a los jóvenes y formulan proyectos.
El corazón de esto es un semillero donde los chicos que participan tienen entre 15 y 17 años. La red trabaja directamente con los jóvenes del territorio para impulsar el turismo deportivo desde una mirada comunitaria, es decir, que nazca desde el propio territorio. ¡Eso es clave! Los estudiantes tendrán la posibilidad de generar talleres conjuntos con jóvenes de semilleros en Costa Rica y Chile.
Se están organizando dos eventos deportivos con un enfoque en deportes acuáticos para enero y febrero del próximo año. Farid, el coordinador local, destacó que llevaban tiempo con la idea de crear algo así y que, afortunadamente, con Andrés y la red, tienen la oportunidad de participar en este tipo de proyectos. Me pareció un proyecto muy ambicioso desde la distancia.
Sostenibilidad: Nuestra brújula hacia el futuro
Una de las cosas que más me resonó, y que siempre defiendo en SUELTALABARRA, es el enfoque 100% sostenible de este semillero. No hablamos solo de cuidar el medio ambiente, que es fundamental y algo que todos debemos hacer. Hablamos de una sostenibilidad económica y sociocultural. Queremos que esto se proyecte en el tiempo, que los eventos dejen huella y que Juan de Acosta no dependa solo de una temporada de kites, sino que florezcan otras disciplinas durante todo el año.
Imaginad el impacto de que estos jóvenes se conviertan en líderes locales, diversificando la oferta y creando un ecosistema donde el turismo deportivo genere empleo, desarrollo y orgullo comunitario. ¡Esa es la visión a largo plazo que buscamos y que me motiva un montón! El semillero tiene como objetivo promover el turismo deportivo como motor de desarrollo económico en Juan de Acosta, involucrando a la comunidad local en la organización de eventos y en la creación de productos sostenibles.
Mi granito de arena: Experiencia, conexión y los 5 puntos claves.
Durante la charla, pude compartir mi experiencia organizando eventos deportivos. Enfatizo la necesidad de una planificación detallada y una gestión eficiente de los recursos. Les conté sobre el Loteta Cierzo Festival en Zaragoza, España, un evento pequeño con 75 participantes que ha generado un impacto económico significativo en la comunidad local. Les expliqué cómo un estudio inicial, mucha publicidad, el apoyo de patrocinadores y entidades públicas (que saben que se genera una economía sostenible a su alrededor), han hecho que el turismo perdure durante todo el año en una población de interior. Hemos llegado a unos valores de 10.000 euros (unos 5 millones de pesos colombianos) en el evento, pero la repercusión es mucho mayor por el dinero invertido en publicidad antes, durante y después del evento, que es el doble de la aportación de entidades locales y patrocinios. Ahora, hoteles se llenan con 200 personas, y la gente quiere volver por la sostenibilidad del evento y el recurso natural del viento.
También les hablé de gigantes como el Nayarit Wind Festival en México, con 400 participantes y actividades como vela ligera, windfoil y wingfoil, o el Red Bull King of the Air en Cabo Verde, en el sur de África, que es el mayor evento de kiteboarding, moviendo sumas incalculables y atrayendo a todas las marcas y competidores a nivel internacional. Les expliqué cómo lugares que antes vivían de la agricultura y la pesca, o eran desiertos inhóspitos como Fuerteventura y Dakhla en África, ahora son poblaciones ricas gracias al turismo deportivo y los deportes acuáticos. ¡Eso es el poder de nuestro deporte!
Les insistí en la importancia de hacer una simbiosis con la población, de unir el deporte con la cultura local. Si un evento es un festival completo, donde la gente no solo va por el viento, sino por la música, la gastronomía, las exposiciones de artesanía local... ¡entonces quieren volver! Y ahí es donde se crea la magia del turismo recurrente.
Para sintetizar lo que comenté, me he apuntado cinco puntos de vista clave para el éxito y la sostenibilidad de estos proyectos:
- Importancia de la planificación y la gestión: Requiere una planificación detallada, una gestión eficiente de recursos y una coordinación efectiva. La logística, seguridad, promoción y contabilidad son las "cuatro patas" que lo sustentan.
- Sostenibilidad del evento: No solo ambiental, sino económica. Tiene que ser sostenible durante el evento y para todo el año, creando una simbiosis para que los participantes vuelvan y encuentren servicios de calidad. La cultura de la población es fundamental para que esto fluya.
- Promoción y marketing: Fundamental antes, durante y después del evento. Hay que estar haciendo promoción durante todo el año en redes sociales, folletos, restaurantes y hoteles.
- Análisis de la repercusión: Es vital contabilizar el marketing después del evento para presentar a los patrocinadores y organizaciones el ROI (rendimiento del dinero aportado). Esto demuestra que, si invirtieron 5.000 pesos y generaron 20.000, querrán invertir 10.000 para generar 40.000.
- Gestión financiera: Es crucial que la economía funcione y sea financieramente sostenible. El dinero generado debe reinvertirse al año siguiente para asegurar un crecimiento multiplicador.
La colaboración y el futuro: Juntos al aire
Me llevé la impresión de que estos chicos tienen una energía increíble. Sus preguntas sobre cómo identificar oportunidades de negocio en deportes náuticos, incluso con poco viento (¡paddle surf y kayak al rescate!), demuestran que tienen la cabeza en su tierra y en el futuro. Me encantó la idea de involucrar a las costureras locales en la creación de productos con materiales reciclados de cometas dañadas. ¡Eso es economía circular de verdad!
Desde SUELTALABARRA, mi compromiso es seguir conectado, apoyar estos proyectos y, como siempre, gritar a los cuatro vientos que el deporte tiene un potencial transformador inmenso. Lo que está germinando en Juan de Acosta es una semilla de la que todos podemos aprender, un ejemplo de cómo podemos empoderar a las nuevas generaciones para que lideren un futuro sostenible y vibrante para sus comunidades.
Como le dije a Andrés y Farid, estoy agradecido por esta oportunidad de compartir mis vivencias. Si mis aportaciones son suficientes y creen que puedo aportar más o dar otro enfoque, estoy a su disposición. De hecho, Andrés me comentó que seré un puente para que estos emprendimientos puedan llegar a Europa. ¡Eso me llena de orgullo!
¡Así que, si tenéis la oportunidad de sembrar una semilla en vuestro entorno, hacedlo! Nunca sabéis qué gran proyecto puede nacer de esa pequeña acción. ¡Nos vemos en el agua o en el aire!
Alex, la cara detrás de SUELTALABARRA.com